El fenómeno de La Niña llegó a México y estos serán sus efectos
El Centro de Predicciones Climáticas indica que se ha hecho oficial la llegada de La Niña, con una anomalía entre -1.1 °C y -0.7 °C a finales de diciembre e inicios de enero en la región 3.4. Los pronósticos a largo plazo indican que seguirá enfriándose el mar, fortaleciéndose La Niña.
Probabilidades de intensidad
Tardó, pero la atmósfera por fin se acopló al 100 % con vientos fuertes en niveles bajos que ocasionaron surgencias (agua fría a superficie) en las últimas 3-4 semanas; ahora, los modelos se han ajustado a extender su presencia con más del 90 % de seguridad que siga en todo febrero, rondando el 80 % durante marzo, cuando la primavera iniciaría.
Por lo menos, La Niña podría seguir hasta finales de abril o mayo con 40 a 60 %, para pasar a una fase neutra en el transcurso del verano. A más largo plazo (menor confiabilidad), la fase neutra o una Niña débil podría estar, estimándose 45-55 % y 30-35 % de potencial respectivamente. Por ahora, es mínimamente probable El Niño.
Condiciones estadísticas normales o promedio
Estamos transcurriendo la primera mitad del invierno, cuando los periodos fríos son de mayor intensidad y frecuencia que, bajo La Niña, hace que las temperaturas sean extremosas para dominar los días cálidos (como se han dado) y siendo más eventuales los fríos, pero que pueden tener gran intensidad con heladas y nevadas.
Las primaveras son naturalmente calurosas, pero con La Niña tiende a ser menos intenso el calor, debido a más frentes fríos activos con lluvias y masas de aire frescas. Las turbonadas en el Golfo de México son frecuentes y las granizadas/tornados pueden aumentar.
Las lluvias tienden a ser menos frecuentes, debido a la posición de la Corriente en Chorro, que limita el ingreso de humedad extensa al país desde el Pacífico, aunque los frentes fríos por el lado del Golfo de México siguen llegando con lluvias. Las heladas nocturnas son más frecuentes e importantes en el Altiplano y estados del norte.
¿Qué se prevé el resto del invierno?
De acuerdo con las actualizaciones, la segunda quincena de enero es factible el ingreso de masas polares y árticas, resaltando después del día 20 con aire ártico que cubriría buena parte de Estados Unidos y por lo menos el norte, noreste y oriente de México, así como parte del Altiplano y sureste, siendo probables lluvias, nevadas y viento fuerte.
A finales del mes e inicios de febrero, podría llegar otra masa polar-ártica, ligeramente de menor relevancia, pero ayudando a tener condiciones invernales. En febrero, el calor comenzaría, pero aún se observa tendencia de masas frías potentes que regulen el ambiente; aunque el norte mexicano tendría frío, sería de menor intensidad.
Primavera 2025, ¿distinta a la de 2024?
Entre marzo y mayo, luce mucho menos calurosa que el año pasado, cuando las anomalías superaban los 5 °C en varios puntos, ahora este 2025 estaría dentro de lo normal o apenas 1 °C más caluroso.
Los estados del centro, oriente, noreste y parte del sureste como Coahuila, Nuevo León, Tamaulipas, San Luis Potosí, Hidalgo, Estado de México, Ciudad de México, Morelos, Guerrero, Oaxaca, Puebla, Tlaxcala, Veracruz y Chiapas podrían presentar periodos de lluvias más frecuentes y eventualmente intensos.
Si La Niña persiste en primavera, podría ser en general menos calurosa y con más eventos de lluvias, granizo y hasta tornados, mientras el noroeste y occidente puede ser relativamente seco. Debemos de tener en cuenta que puede haber variaciones en la previsión.
Lo anterior, resalta para marzo y más en abril, estimándose para mayo que la temporada de lluvias pueda iniciar en “forma” con más lluvias en el centro, oriente, noreste, Pacífico y península de Yucatán, ayudando a que no sea tan caluroso el mes, quizá también con menos incendios en esta época.
Con información de www.meteored.mx