La mañana del pasado jueves, se reportó un fuerte sismo de 7.0 en la región noroeste de California, Estados Unidos, de acuerdo con datos del Servicio Geológico de EU (USGS), con epicentro del terremoto a 99 kilómetros al noroeste de la ciudad de Ferndale, profundidad de 10 kilómetros, cerca de las 10:44 horas locales.
Aunado a lo anterior, inicialmente la USGS reportó una magnitud de 6.6, indicando que el temblor se había registrado en plena Falla de San Andrés.
Por lo que, a raíz de la intensidad del sismo y su cercanía a la costa, el Centro Nacional de Alerta de Tsunamis emitió una alerta de emergencia para el norte de California, que abarcaba desde la ciudad de San Francisco hasta el sur de Oregón.
Dicha alerta afectó a más de 5 millones de personas en la región. Sin embargo, la advertencia fue cancelada poco después de más de una hora.
Minutos después, una réplica de gran magnitud, de 5.8, fue registrada en las cercanías de Cobb, California, en el condado de Lake, según el USGS.
Cabe resaltar que, el sismo se sintió en diversas localidades a lo largo de la costa norte de California y el Valle Central, incluidos San Francisco, la Bahía del Área de la Bahía y Sacramento. Residentes de estos lugares reportaron haber experimentado temblores y algunos usuarios en redes sociales compartieron videos del momento del terremoto.
Aunado a lo anterior, el evento sísmico causó importantes interrupciones en los sistemas de transporte. El servicio del Metro de San Francisco fue retrasado y se suspendió temporalmente el tren a través del tubo submarino Transbay. Además, las carreteras en las áreas cercanas a la costa presentaron niveles de tráfico elevados debido a las evacuaciones ordenadas en zonas vulnerables al tsunami.
Por último, a pesar de la alarma inicial por el riesgo de tsunami, no se reportaron daños graves, y las autoridades locales continúan monitoreando la situación mientras se restablecen los servicios de transporte.
Con información de Excélsior
*ARD