A través de redes sociales se dio a conocer un casi monólogo de tres minutos, donde un sujeto le defiende tener amantes con el argumento de que es para perdurar la relación, situación que se viralizó debido a la división de opiniones.
“El día que un hombre engañe a una mujer, ya vale greña todo”, dice la mujer, asegurando a que tener una relación solo es cosa de dos, sin embargo, su marido la contradice y le argumenta que, “no”, “estás mal, hermosa”.
Pues asegura que, un hombre puede engañar a una mujer, pero eso no quiere decir que no la quiera, sin embargo, la mujer lo interrumpe y le dice que vaya a otra parte con esa psicología.
“No me metas esa psicología a mí, No me la armes”, le expone la esposa
“Es un resbalón, hermosa”, le aclara. “Es un resbalón que tenemos los hombres”, le insiste.
“Si yo te engaño con una mujer no quiere decir que no te quiera”, le asegura. “¿Qué tal si lo hice pedo o borracho? Agarra el rollo, no estaba en mis cinco sentidos, cuando menos pensé ya me levanté con otra mujer. Eso no quiere decir que no te quiera. ¡Estás loca!”.
A lo que la mujer, le dice: “Y tú crees que yo te voy a perdonar eso?”
“Sí, hermosa, lo tienes que superar, poco a poco lo tienes que asimilar”, responde el machito.
“¿Y si te cambio la tortilla, yo?”, le pregunta la mujer ya molesta.
“Cámbiala, cámbiala. Como tú quieras, pero es lo que te estoy diciendo”.
Posteriormente otra mujer interviene y pregunta al sujeto: “¿Vas a superar tú, eso?”, a lo que él muy seguro dice: “Sí, Ceci, sí lo supero. Jálate”. Y le dice “hasta con dos te puedes aventar el tiro. Por mí, no hay pedo. De eso pido mi limosna, ni que tuviera tanta suerte. Ojalá me engañaras”.
Asimismo, la esposa le advierte que se convertirá en “su sombra”, mientras que el conductor, comenta, “ese es el problema. Con eso me amenaza: yo la puedo engañar, pero ella nunca me va a dejar”.
A lo que, el hombre insiste con su esposa, “Hermosa, si yo te engaño no quiere decir que yo no te quiera”, presumiendo conocer a las mujeres: “Todas las mujeres piensan lo mismo: ay, me engañó, lo odio y lo dejo. No, señorita, usted tiene que aguantar”.
“A ver, que tal si me emborracharon, qué tal si fui a un cotorreo y me echaron algo en la bebida”.
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Sin embargo, si tiene una relación en sus cinco sentidos, “ahí, ya cambia la cosa. Ahí sí te puedo decir: Sabes que mi amor, no te quiero, por eso te engañé, pero no se vale, borracho, no se vale”.
“¿Acaso no los borrachos y los niños dicen la verdad?”, pregunta.
“Sí, hermosa, pero ustedes las mujeres deben de entender que uno cuando sale a cotorrear, a aventarse una cana al aire, es cotorreo, es distracción. ¿Me entiendes? Es quererlas más. Yo te quiero más a ti cuando te engaño, ¿por qué? ¿Por qué te tengo que engañar? Porque quiero que nuestra relación perdure muchos años más. Si yo nomás me quedo contigo me voy a enfadar”.
“Si todos los días como pescado me voy a enfadar, ¿cierto?”.
“Claro”, responde.
“Si todos los días te tomas un jugo de naranja, va a llegar un momento en que no lo vas a querer. No, yo quiero un agua natural, quiero una Coca Cola”.
“Si yo como todos los días a mi vieja, me voy a enfadar”. ejemplifica.
Asimismo, le recuerda que tienen 10 años de relación y bien pueden durar otros días más, “¿Por qué crees que no te soporto? ¿Por qué crees que me aviento una cana al aire”, le puntualiza
“No hermosa, cuando usted me vea con una vieja, usted lo que debe de hacer es: ‘Bravo mi amor’. Así, mijo, diviértase, me gusta verlo feliz. Me merezco eso, trabajo un chingo”.
Por último, le pregunta cuándo va a disfrutar de la vida si ya está viejo a sus 39 años.
Con información de Excélsior
*ARD