La semana pasada abordamos los aspectos más importantes para recoger ideas en un trabajo académico y que requiere de una investigación sin que sea un trabajo exhaustivo. Hay que recordar que los índices nos marcan una indicación preliminar de cómo se puede estructurar un trabajo de esta naturaleza.
En todo en todo texto académico es importante recoger datos e ideas que se van que se van redactando de manera neutra y objetiva. En ella se deben abordar hechos y realidades para responder con claridad a las preguntas que inicialmente nos formulamos al definir el tema de trabajo. No se trata de suposiciones o creencias. Es necesario recopilar información veraz sobre un hecho o fenómeno, y señalar con claridad, qué es lo que se debe saber para entenderlo.
Por ejemplo, si el tema son los ciclones, es indispensable saber cómo se originan, describir los eventos y procesos que van sucediendo y cuáles son las relaciones de causa y efecto, así como las consecuencias de su paso, para estructurar la información de manera organizada.
Como ejercicio, en esta época de lluvias, trate el lector de explicar cómo se originan los huracanes. Se puede empezar por decir que los huracanes son fuertes vientos que se originan en los océanos. ¿Qué más sucede?
Cuando queremos contestar nuestras preguntas en nuestro trabajo de investigación, es importante establecer relaciones de causa y efecto, responder a las preguntas de por qué ocurren, qué las provoca, como consecuencia de qué. Hay que explicar con claridad cómo ocurren los fenómenos, procesos o acontecimientos objeto de nuestro trabajo. Ya sea la violencia escolar o social, un eclipse o una marea.
Al describirlos se deben identificar cuáles son las características que tienen, su origen y desarrollo, paso por paso, de una manera clara, directa y concisa.
En la descripción estos procesos hay que utilizar diferentes tipos de nexos gramaticales tales como: desde esta fecha o momento, a partir de, consecuentemente, por lo tanto, durante, por lo cual, cuando, etcétera. Son nexos que se utilizan para establecer una secuencia lógica y ordenada que le proporcione al lector una visión inmediata de cómo ocurre lo que se pretende explicar.
Nunca debemos olvidar al lector. Se escribe para él. Para que lo entienda de una manera pronta y directa.
Un ejercicio para ello sería describir el nacimiento, desarrollo, madurez y muerte de una flor, como si fuera una película. Intente hacerlo el lector como ejercicio.
En la búsqueda de la selección y la redacción de la información, es importante leer con atención las preguntas que nos formulamos al principio. Volver a identificar las palabras clave y las frases importantes y en función de ellas seleccionar el material de utilidad.
Se deben revisar de manera continua los índices propuestos inicialmente, con títulos y subtítulos trazados desde un principio para redactar el texto expositivo de nuestra investigación sin olvidar las definiciones importantes, los momentos, las relaciones de causa y efecto, la descripción lógica y puntual.
Para dar respuesta a las preguntas formuladas, se debe tener una oración principal, con oraciones y frases de apoyo secundarias que incluyen explicaciones, ejemplos, imágenes, gráficas y todo el material que sean pertinentes al tema de la investigación.
Finalmente hay que anotar las referencias bibliográficas de todo el material utilizando una metodología apropiada. En los contextos escolares y profesionales se conoce como reglas APA, que es un estilo de organización y presentación de la información.
Pero como esta sección solamente aborda ideas para escribir mejor, sin tanta metodología, hasta aquí queda este artículo.
*IC