VIDEO. Karla denunció acoso en la Marina; se quitó tatuaje con bisturí

“Solicité mis vacaciones y comencé con terapia psicológica porque esta persona ejercía demasiada presión sobre mí abusando de su autoridad”

A través de sus redes sociales, Karla Narvalles, elemento de la Secretaría de Marina, denunció ser víctima de acoso sexual por mando superior, por lo que tuvo que renunciar a su sueño de pertenecer a la institución, ya que un mando superior la acosó y nadie le hizo caso cuando manifestó lo sucedido.

La joven acusó que, en 2020 fue alta en la Semar, sin embargo, la transfirieron de manera arbitraria a la Guardia Nacional, donde fue víctima de acoso, cuando un mando comenzó a acosarla sexualmente todos los días durante febrero y marzo del presente año.

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Asimismo, en un video la también ex militar Alexa Bueno, brindó más información sobre lo ocurrido cómo nadie en la Secretaría de Marina y Guardia Nacional la apoyó, pese a denunciar formalmente en instituciones.

“Mis años de servicio fueron los mejores hasta que un mando decidió acosarme sexualmente todos los días durante los meses de febrero a marzo del presente año (2022). Solicité mis vacaciones y comencé con terapia psicológica porque esta persona ejercía demasiada presión sobre mí abusando de su autoridad”, dijo la joven en Instagram.

mano

De acuerdo con la información que dio a través de sus redes, la joven causó alta en 2020 en la dependencia a cargo del almirante Rafael Ojeda Durán, pidió “Justicia para Karla”, además, destacó que entre todos los esfuerzos que hizo para pertenecer a la Semar estuvo el quitarse con bisturí un tatuaje que se hizo con su mamá, “que tenía mucho significado para ambas”: “Simplemente no me dejaron entrar con él a pesar de que en todas mis pruebas y exámenes salí en perfecto estado, acepté sus reglas”.

“En fin, poco duró el haber ingresado a la Secretaría de Marina debido a que me comisionaron sin preguntar a la Guardia Nacional, y como a muchos, mandarme lejos de casa y de mis padres, a pesar de eso yo nunca dejé de echarle ganas porque mi vocación siempre fue esa, y muchos de los que me conocen lo saben”, señaló Karla.

denuncia

Además, tomó terapia psicológica, porque le ejercía demasiada presión, abusando de su autoridad, comento, por lo que decidió ausentarse de sus labores, “no sin antes realizar un informe/denuncia, explicando a detalle” su situación.

“Nadie ha hecho nada, sino al contrario, solo he recibido ‘recomendaciones’ de que YO debo ir a prisión militar por ausentarme de mis labores, a cumplir una condena de tres meses a pesar de que justifiqué mi ausencia como corresponde”.

“Se han estado echando la bolita (…) “Si tu deseo es ingresar a estas instituciones, no vale la pena, nadie verá el esfuerzo que ha hecho por estar ahí, y siempre le darán la razón al acosador y al hostigador solo porque tiene grado. Se supone que están para cuidar a la ciudadanía, pero tienen dentro de sus batallones y bases al enemigo”, agregó Karla Narvalles.

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Por último, Karla cansada de las insinuaciones decidió solicitar vacaciones de su acosador y al regresar y plantear la idea de retirarse y denunciar, las cosas fueron más complicadas.

Alexa Bueno recibió maltratos e insultos de sus mandos

Por otro lado, Alexa Bueno, dijo en entrevista en YouTube que entró a la Semar como infante de Marina y después fue mandada a adiestramiento a Sinaloa, pero desertó igual por acoso.

“Empezó a cambiar todo cuando a mí me mandan a Zacatecas en noviembre del año pasado y comencé a tener contacto con un teniente que iba como al mando de mi sección y pues quiere como empezar a hacer amistad conmigo (...).Sus acercamientos comienzan a ser más fuertes hacia conmigo”, relató sobre el teniente de fragata que la acosaba.

Asimismo, dijo que su acosador tenía la “mañita” de decirle, “chilanga”, pero los comentarios se subieron de tono con “es que la chilanga está bien buena, es que a quién no le va a gustar la chilanga, es que chilanga párale, quédate en posición de lagartija porque me gusta cómo te ves así (...)”.

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“En la parte de la de la despensa, es un cuarto en la despensa y él era así, de ‘ya chilanga, vámonos al cuartito’, ‘ya chilanga, vete al cuarto’. No había día que yo no escuchara esa frase todos los días, ‘ya chilanga, vámonos al cortito’, ‘ay, chilanga, es que estás bien buena, ya vámonos al cuartito'”.

 Recibía comentarios incómodos y misóginos, pese a que los comandantes los escuchaban, “no decían ni hacían nada”, por lo que no toleró más acosos.

Por otro lado, destacó que el acoso era una constante, pero muchas personas de la unidad tenían miedo de confrontarlo, pues es una persona que “explota” y maltrata a las personas.

 “La verdad es que, a ese teniente, la mayoría, le tenían miedo, no respeto ni por el grado. Era miedo de que tú le dices algo a ese teniente y ese teniente enseguida explota y te empieza a decir ‘es que eres un pendejo, eres un inútil, no sirves para nada. O sea, incluso hubo muchos compañeros a los que paró en frente de todos y los empezó a regañar de que ‘no sirves para nada, te gusta andar valiendo verga’, esas eran sus palabras”.

Por lo que, al rechazar un puesto de trabajo con el teniente, su comportamiento fue más agresivo en su contra, pues la obligaron a hacer tareas de limpieza e insultarla en público.

Con información de El Universal

*ARD