Ya hay zonas de México catalogadas como peligrosas, en estados como Guanajuato, Michoacán y Zacatecas, donde algunos transportistas no ingresan por los riesgos que corren ante los altos niveles de inseguridad.
José Guillén González, delegado en Aguascalientes de la Alianza Mexicana de Organizaciones de Transportistas (Amotac), manifestó que los focos rojos no se limitan a esos tres estados, pues también hay una amplia concentración de robos a transporte de carga en el Estado de México, Puebla, Veracruz, Jalisco y San Luis Potosí.
Apuntó que los robos a transportistas es una situación que por las dimensiones de Aguascalientes y el blindaje que existe en los accesos carreteros se ha librado la entidad, pero los operadores deben circular por todo el país, y apenas salen de los límites estatales comienzan los problemas.
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José Guillén afirmó que este problema de la inseguridad se agravó porque quitaron la Policía Federal y pusieron a la Guardia Nacional, siendo que el cuerpo policial ya tenía experiencia en la vigilancia de los caminos, y aunque algunos elementos incurrían en extorsiones, bastaba con cesarlos.
Lamentó que los nuevos elementos de la Guardia Nacional “a veces no saben ni hacer una infracción”, pues apenas recibieron una capacitación de tres meses; agregó que otra problemática es que tampoco se ha erradicado la corrupción, porque las extorsiones siguen y piden hasta 10 mil pesos por dejar circular a los transportistas.
Para concluir, el delegado estatal de la Alianza Mexicana de Organizaciones de Transportistas mencionó que los más grave es que los elementos no atienden los reportes de robos y accidentes que realizan los operadores, y cuando no hay una respuesta rápida ante este tipo de incidentes, las consecuencias de los mismos se agravan y en ocasiones se vuelven fatales.
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